Tradición y Sabor se Fusionan en un Evento que Resalta lo Mejor de la Cultura Quibdoseña
Los aromas envolvían las calles, desde la yuca cocida hasta el pescado frito, mientras el público se paseaba entre los coloridos puestos de comida en la feria gastronómica y cultural San Pachera. Cada bocado era una explosión de sabores, platos rebosantes de tradición que los cocineros servían con una sonrisa orgullosa. Las bebidas autóctonas, como el viche y el biche, se ofrecían en jarros que tintineaban al ser levantados para brindar entre amigos.
Las manos de los artesanos se movían con precisión, tejiendo fibras y moldeando el barro, transformando materias primas en piezas únicas que cautivaban a los visitantes. Entre los puestos, los más pequeños tocaban con curiosidad las texturas de los tejidos mientras los mayores admiraban el detalle en las obras.
La música en vivo marcaba el ritmo del evento. Los tambores retumbaban y los pies se movían al compás, conectando a todos en una danza que reflejaba la alegría y el espíritu de Quibdó. Los vendedores de artesanías charlaban animadamente con los visitantes, mostrando orgullosos sus productos mientras el público se sumergía en este vibrante encuentro entre tradición, gastronomía y cultura.
"Este es un espacio que nos une, donde celebramos nuestras raíces y mostramos lo mejor de nuestra tierra", comentó uno de los expositores, mientras ofrecía una bandeja de patacones recién hechos. Con cada plato, con cada pieza de arte, Quibdó demostraba que la tradición y la cultura siguen vivas, ofreciendo una experiencia inolvidable para todos los que se dejaban envolver por los sonidos, colores y sabores de la feria.